Es el más rígido de todos los flejes de plástico. Tiene una elongación menor que el fleje de polipropileno, pero se puede aplicar una mayor tensión inicial y mantenerlo durante un período más prolongado de tiempo.
Es utilizado desde cargas ligeras; tarimas de aluminio, botellas de PET, industria alimenticia, cargas pesadas como material de acero, ladrillos, mosaicos y cargas medianas como material de madera, muebles, papel, cartón, entre otros.